Me gusta el mundo de las cosas sencillas;
con oraciones simples que expliquen
una vida siempre tan compuesta,
tan llena de subordinadas
y de carreteras secundarias.
Deseo un sol que abrase el horizonte,
autobuses que pasen a su hora,
puertas que se cierren suavemente
y ojos que anuncien atardeceres.
y ojos que anuncien atardeceres.
Niños con churretes en la cara
y las rodillas siempre arañadas;
con madres educando en los límites
y amorosas abuelas besuconas.
Espero ríos desembocando en el mar,
y gentes que escuche a otra gente
y gentes que escuche a otra gente
de colores y costumbres lejanas.
Quiero muchos maestros que enseñen
y muchos médicos que curen.
Busco cielos azules sin guerras.
Presto oídos a las quejas del mar
y ojos a los llantos de la Tierra.
Tengo que abrir ya la vieja alacena;
vaciarla de cuitas pendientes,
y no volver a guardar ni una pena…
y no volver a guardar ni una pena…
Quiero vivir una vida sencilla.
Carlos Bernal
23 de diciembre de 2023.
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