Se confía…
el carnicero avezado,
pues con años de cuchillo
dando el corte certero,
es tomado por experto.
pues con años de cuchillo
dando el corte certero,
es tomado por experto.
Se confía,
-y aquí viene el cuento-,
se confía
hasta que llega un día
que cortando carne,
se corta el dedo.
Y no se hace esperar la moraleja:
La experiencia no lo es todo,
pues traiciona hasta al más listo
convirtiéndolo en un bobo.
Pero hay modo de salir ileso:
Cuidar el cuchillo, atinar el golpe,
atendiendo siempre donde está el dedo.
(Aplíquese a cualquier sector, profesión o incluso monarquías...)
Carlos Bernal.
Actualizado en enero de 2024.
No ha habido nunca, ni siquiera cuando tuvo lugar la primera entrevista entre Sánchez e Iglesias, voluntad alguna de formar un gobierno de izquierda, sino más bien de hacer ver al electorado que el Partido Socialista de Sánchez no tiene nada que ver con extremistas insensatos y peligrosos como los que se esconden tras las siglas de Podemos sus confluencias y aliados, todos ellos peligrosísimos antisistemas que se han atrevido a denunciar el fraude democrático de las puertas giratorias, los abusos de las grandes multinacionales y nacionales y la situación tremenda en que sobreviven los trabajadores precarizados y los que no tienen trabajo, la corrupción sistémica y el uso de la política como instrumento de lucro. Una barbaridad con la que los amigos de Sánchez no pueden comulgar porque sería tanto como despreciar al régimen del que son columna fundamental y que tantos beneficios les ha deparado. Por el contrario, tal como consta en su programa último, “la socialdemocracia renovada del PSOE se comprometió con la necesidad de erradicar la pobreza, y en especial, la infantil, hacer realidad un plan de rescate juvenil y resolver el déficit en el sistema de seguridad social que respetara la revalorización de las pensiones en función del IPC....”, cosa que sería imposible de la mano de Podemos, y que se conseguirá sin ningún problema con una alianza fraternal con Ciudadanos, ocupando su lugar, y si fuese menester con un pacto a tres con el Partido Popular, partidos como se sabe muy izquierdistas que siempre han luchado por los derechos de los trabajadores, los pensionistas y los excluidos, eso sí, sin subir los impuestos, privatizando los servicios públicos esenciales y laminando todos los derechos políticos, económicos, sociales, culturales y medioambientales que son inherentes a los seres humanos y que como nos importan una figa, nadie echará de menos. Pedro Luis Angosto. Fragmento.
ResponderEliminarCómo ves amigo Carlos, algunos votantes, no solo se cortan un dedo, sino que algunos se cortan la cabeza. Lo que yo llamo la rutina del voto temerario. Un abrazo.
ResponderEliminarPues la verdad es que me ha encantado el comentario; pensé que era tuyo, pero vamos, podrías haberlo escrito tú perfectamente, o yo, o tantos y tantos españolitos que a día de hoy pensamos prácticamente lo mismo. Me alegro mucho que te haya llegado la alegoría pretendida en el verso; temía que no se entendiera, pero veo que sigues fino de oído... En fin, amigo, seguiremos templando las gaitas y afinando las guitarras para futuros conciertos, para los que nos siguen faltando un director de orquesta... Abrazo fuerte.
Eliminar